Los estiramientos previos a la actividad física son esenciales para evitar lesiones en cualquier tipo de actividad deportiva, por ello son considerados como el pilar o la base de la preparación física.
Se trata de la realización de suaves movimientos que tienen como finalidad la adaptación tendinosa muscular que permitirá una exigencia mayor posteriormente acorde a la disciplina física que se practique, evitando la aparición de calambres o esguinces.
Lo que debemos tener muy en cuenta respecto de toda actividad física es que su realización siempre debe ser gradual y progresiva, para llevar a cabo un buen trabajo deportivo. Por lo general se recomiendan comenzar con estiramientos cortos y suaves, para luego incrementarlos de un centímetro y manteniendo la posición entre 10 y 15 segundos, pero sin sentir dolor, ya que si aparece nos estamos excediendo en el movimiento.
Los estiramientos en realidad se extienden más allá de las actividades deportivas, ya que es recomendable que todos los realicemos a diario sin condicionamiento de edad, debido a que mantener la flexibilidad es esencial para toda actividad de la vida cotidiana, además de ayudar a reducir los niveles de estrés y mejorar la postura, dos situaciones que desequilibran o perjudican nuestra salud.
Resumiendo; no es necesario ser un atleta para realizar estiramientos a diario, solo debemos adaptarlos a nuestras posibilidades personales y saber cuáles son los mejores momentos para realizarlos, por ejemplo:
-Al levantarnos y antes de acostarnos, son los más recomendables.
-Después de cada hora en el trabajo, ya que nos brindan relajación.
-Cuando nos encontremos tensos, particularmente en el caso del cuello.
-Inmediatamente después de haber mantenido una posición fija por mucho tiempo.
Consejo saludable; cuando incorporamos los estiramientos de forma regular a nuestra vida, vamos a gozar de una mayor elasticidad general para realizar cualquier tarea, así como una mejor motricidad, junto a un buen estado de ánimo diario.
